Han matado a una mujer Cadena de favores LGTBI

09 d’agost de 2019
Han matado a otra mujer.

Las letras son tan crudas como la noticia.

Han matado a otra mujer y nos han matado a todas.

A ti, a mí, a tus hijos, a nosotras.

Al silencio.

Y a las personas.

Han matado a otra mujer.

Se ha llevado el miedo. Ha tendido su vida.

Nos ha dejado el silencio golpeándonos en las sienes.

La rabia y la impotencia.

El ruido cubierto de quien no escucha.

La ignorancia maldita.

La maldita ira.

Han matado a otra mujer.

Tengo acuchillada la valentía.

Las manos temblorosas,

las lágrimas deshaciéndose

en un laberinto que debe tener salida.

Uno en el que se quedan los cobardes

y no salen nunca.

Uno en el que la mujer ya no es noticia.

Uno en el que el titular

es que otra mujer sigue viva.

Han matado a otra mujer

Y nos han matado a todas.

A una mujer.

En memoria de la mujer asesinada en Terrassa por violencia machista el 24 de julio.

Me alegró la noticia de que un gasolinero en Sudafrica dio de su bolsillo 6 euros en gasolina, a una joven que no le llegaba para pagar y le dijo que ya se lo pagaría otro día. La chica contó su experiencia en las redes de comunicación social y a través de ella se recogió treinta mil euros para el gasolinero, con los cuales podrá pagar la educación de sus hijos y comprarse una casita. Sería estimulante procurar hacer cada día un favor y al recibir las gracias decir que continúe la cadena de favores haciendo otro favor a alguien. Creo que ésto haría la vida más agradable y más humana.

De les dues una: si no hi ha, sexe es amor platònic i si n hi ha no és, ecològic.