Los partidarios de la independencia muestran su fuerza en la calle

Publicat el 11 de setembre de 2017 a les 20:48
Eran las tres de la tarde y decenas de terrassenses, muchos de ellos con "estelades" a modo de capa, se encaminaban hacia las estaciones de trenes para viajar a Barcelona. Cientos de egarenses participaron ayer en una Diada que no era una Diada cualquiera: era la última antes de la cita del 1 de octubre, del referéndum de independencia. Era la de mayor importancia histórica de los últimos treinta años. Se trataba de la "Diada del Sí", como se encargaba de dejar claro la Assemblea Nacional Catalana (ANC) en sus carteles anunciadores, en los que había inscritas dos fechas: la de ayer 11 de septiembre, y la del 1 de octubre. La ANC y la Guardia Urbana de Barcelona hablaron de un millón de asistentes. El diario El País, de medio millón.
Al margen de la habitual guerra de cifras, lo cierto es que había cientos de miles de personas ayer en las calles del centro de Barcelona. Cientos de miles de personas que guardaron un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados terroristas perpetrados el 17 de agosto en Las Ramblas y en Cambrils.
Cientos de miles de personas que gritaron "independència" decenas de veces, y que gritaron "votarem" otras tantas. Y que formaron una cruz de multitudes en el Passeig de Gràcia y la calle de Aragó. Y que oyeron a Jordi Sànchez, presidente de la ANC, declarar en el escenario de Plaça Catalunya que "el pueblo catalán ha ganado de nuevo la calle" y que se ha creado "una nueva legalidad". Las resoluciones del Tribunal Constitucional, advirtió, ya no les vinculan. "De todas las revoluciones posibles, la que hacen los catalanes es la mejor de todas, la de las sonrisas, porque nos llevará al referéndum el 1 de octubre", dijo. El Orfeó Català había cantado "Els segadors".
Según las cifras de la ANC, al mediodía las inscripciones para los tramos de la marcha superaban las 450.000 y más de 1.800 autocares estaban en ruta desde diversos puntos de Catalunya camino de la capital. Todos los tramos de la concentración estaban llenos, pero la organización habilitó un tramo 0 para aquellas personas que quisiesen inscribirse en el último momento y no pudiesen asistir al acto.
Antes, por la mañana, la tradicional ofrenda floral a Rafael Casanova dio mucho de sí en gestos y declaraciones. Allí estuvo Artur Mas, expresidente de la Generalitat, vaticinó que el 1 de octubre será "un éxito" y llamó a los independentistas a hacer "un esfuerzo final" y a "acumular fuerzas" frente a lo que consideró "intolerancia" del Gobierno español, según la agencia EFE. Como mucho otros, Artur Mas señaló que la Diada se iba a convertir en el "preámbulo" del éxito del referéndum. Estamos, dijo, en el "esprint final". "Ha costado mucho llegar hasta aquí. La oposición del Estado y del Gobierno son fuertes y duras, muy intransigentes e intolerantes, pero un pueblo determinado a hacer valer su voz y a votar, que tiene las instituciones al lado y a los políticos dispuestos a llegar hasta el final, un pueblo así se sale con la suya", declaró Mas.
Aunque ayer el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, evitó cargar contra los ayuntamientos que "legítimamente han optado por no colaborar", el Govern había trasladado en los últimos días a los consistorios una alta porción de responsabilidad para el desafío del 1-0, para que cedan espacios municipales como colegios electorales en una consulta suspendida por el Tribunal Constitucional.
Ayer por la mañana, junto al monumento a Rafael Casanova, Carles Puigdemont coincidió con Ada Colau, alcaldesa de Barcelona, y Núria Marín, primera edil de l'Hospitalet de Llobregat. Marín pidió a Puigdemont que deje tranquilos a los alcaldes, según confirmó a EFE la propia alcaldesa. Unas horas antes el presidente había emplazado a los asistentes a un acto de la ANC a que presionasen a sus alcaldes para que no impidiesen el voto.
Puigdemont aseguró ayer que no tiene "miedo" a ser detenido por desobedecer al Estado y explicó que ya se están preparando "alternativas" para poder votar en aquellos municipios que no colaboren. Y se mostró "abierto" a dialogar con Mariano Rajoy, presidente del Gobierno español, "hasta el último minuto"; eso sí, a dialogar sobre los términos de un referéndum . Seguramente, el Tribunal Constitucional suspenderá hoy la ley de transitoriedad jurídica aprobada la semana pasada en el Parlament para "desconectar" a Catalunya de España tras el referéndum. La ANC afirmó que agotó las camisetas. Vendió 300.000