Este crecimiento podría situarse “incluso por encima del 3%”, aunque no detalló la cifra que aparecerá en las nuevas proyecciones de la economía española que el Banco de España publicará la próxima semana (actualmente está en el 2,8%).
Demanda nacional
Este crecimiento se basará en el “fuerte ritmo de expansión” de la demanda nacional y la contribución del sector exterior, a su vez influídas por el “dinamismo” del empleo y la facilidad de acceso al crédito. A pesar de ello, Linde puntualizó que a medio plazo las tasas de crecimiento serán “más moderadas”, a medida que desaparezcan factores como la caída del precio del petróleo o la moderación de los costes de financiación.