Mini casas 45X3 

Publicat el 02 de febrer de 2018 a les 19:15
El terrassense Agustín Góngora, y su mujer, la arquitecta Mónica Fernández, son el "alma máter" de "Mini Casas Barcelona", una nueva empresa que basa su modelo de negocio en un triple "45". Esta estrategia se desglosa de la siguiente manera: construcción de casas de 45 metros cuadrados de superficie útil, con un precio de 45 mil euros (arquitectura y construcción, todo incluido) y un plazo de entrega cerrado de 45 días. Ni más ni menos. El secreto de la fórmula la describe el propio Góngora. "Nos hemos especializado al máximo en un único producto. Por ello mismo, cumplimos nuestros compromisos".

El "target" de clientes, añade Góngora, además, es muy amplio, mucho más de lo que podía intuirse. Y en algunos casos, se trata de proyectos sorprendentes. "Hay desde jóvenes que quieren tener su propia casa para empezar una vida en común a personas mayores que poseen una vivienda grande, y desan reorganizar su vida en un espacio mucho más manejable". En otros casos los clientes son menos convencionales. Por ejemplo, familias que viajan y vive en autocaravanas y, finalmente, optan por tener una vivienda "fija" de referencia. También se han interesado personas con gran poder adquisitivo y que deseaban disponer de una "minicasa para invitados".

Góngora desconoce la existencia de otra empresa, en el sector de la construcción, con tal alto grado de especialización. "De hecho, en Cecot, nos dicen que estamos creando este mercado". La empresa ha arrancado, de hecho, recientemente y ya tiene sus primeros encargos. La primera "mini casa" se está construyendo en Vacarisses y será de una pareja que posee un terreno en esta localidad, en el que quiere alojarse los fines de semana. La empresa ya ha cerrado otros dos proyectos (en Lliçà y Canovelles). Para ser fiel a todos sus compromisos y exquisita dedicación, este empresario comenta que sólo construyen una casa de una vez, y por lo tanto, los clientes interesados deben guardar lista de espera. Eso sí, esa lista corre puntualmente cada 45 días.

Personalizable
La casa es única pero no tiene por qué ser siempre exactamente la misma, al margen de los metros totales de superficie, ya que los clientes pueden elegir la distribución de los espacios interiores y también los acabados (en este caso, si no son los que se incluyen en el proyecto, se pagan aparte). Es decir, la casa se puede personalizar en algunos de sus aspectos. A grandes rasgos, comenta Góngora, se ofrece un casa de treinta metros de planta, más un altillo de quince metros, donde inicialmente se ubican dos habitaciones. En los bajos, por lo tanto, se emplaza el comedor office, lavabos

y resto de servicios. "La idea es de un gran espacio a doble altura; y el aprovechamiento óptimo de cada metro cuadrado con el concepto, diríamos, de autocaravana". Las fotos de construcción de esta casa y de otras que vendrán se publican en Instagram. "Colgamos fotos cada día; hoy (por el 24 enero) estamos en el día 18 de la construcción", comenta. La casa se puede ir ampliando en función de las necesidades futuras del cliente.

Las Tinyhouse como inspiración
La idea surgió, salvando las distancias, a partir de las TinyHouse, que arrasan en los bosques de Estados Unidos. Se trata de micro viviendas transportables que se usan para llevar un estilo de vida en contacto con la naturaleza en plena ciudad, escapando del estrés y el frenético ritmo urbanita. En el caso de que nos ocupa, se ofrece "una casa de obra tradicional avanzada, y no de madera, y mejorando la calidad, el precio y los plazos de entrega de las casas prefabricadas", comenta Agustín Góngora. "Con esta opción estamos abriendo el acceso al mercado inmobiliario a un amplio abanico de personas", concluye este empresario terrassense.