La publicación de botànica número 104 del doctor Àngel Manuel Hernández Cardona (ha dado a las prensas otras 33 sobre historia de la medicina y la ciencia, y 106 más sobre temas diversos, en su mayor parte de historia comarcal, este gran e incesante "pencaire" ) es "Flors del Pirineu", un libro de intención divulgativa pero que no cede un ápice de rigor científico; ideal (también por su tamaño, casi de bolsillo) para llevarlo en cualquier recorrido por la cordillera que marca el norte de la península ibérica y de Catalunya. En la introducción, Hernández explica "qué es una planta" y "qué es una flor", también de los Pirineos y su vegetación, y con solo cuatro páginas le da al lector lego en botánica una magistral síntesis de los conocimientos básicos de la materia para entrar bien puesto en lo que sigue: las fichas de 170 plantas con flores, dos por página, cada una con sus nombres, descripción, período de floración, distribución y hábitat, usos (especialmente medicinales) y, en algunas, información adicional.
Hernández, por supuesto, sabe de cada planta mucho más de lo que ha puesto en el libro. "Empecé escribiendo un folio para cada ficha, y fui recortando. En parte está bien, porque así te vas quedando solo con lo esencial." También en los Pirineos hay muchas más plantas con flores. La cordillera tiene una de las floras más ricas de Europa, con unas cuatro mil especies."Este es un libro para el gran público, no para los profesionales. El editor impuso un número determinado de páginas. Le pedí unas cuantas más, para poner algunas otras plantas, pero no pudo ser, porque había de guardar un equilibrio entre el precio y la calidad."
Escogidas por su vistosidad
¿Cuál ha sido el criterio para escoger esas 170? Básicamente, "su belleza y su vistosidad, y que sean aparentes". Las hierbecitas que tienen flores pero apenas se ven, los árboles (la major parte de los cuale no hacen flores típicas), y por supuesto los hongos (que son vegetales pero no plantas), quedaron así excluidos. Igualmente se descartaron aquellas especies que se hacen en los Pirineos pero también en buena parte de Catalunya.
Entre las bellezas botánicas seleccionadas , "hay de todo: desde plantas que viven en altitudes bajas hasta hierbas que llegan a las cumbres más elevadas, y desde plantas comunes hasta especies endémicas". ¿Las favoritas del autor? "Quizá el 'marcòlic groc', que es el símbolo del valle de Núria y de los Pirineos; también la 'corona de rei', que tenía fama de abortiva y emenagoga, pero su uso era peligroso por su toxicidad".
Algunas especies venenosas son también de uso medicinal,y Hernández siempre indica de ellas sus dos condiciones, "Hay plantas muy venenosas que, en cantidades infinitesimales, son medicinales, y muchos libros no lo explican."
También cuenta brevemente algunas leyendas, como el mito de Narciso con respecto al "narcís de muntanya", sobretodo asociadas a sus nombres; algunos son un poema en sí mismos y otros harto curiosos (la "rovell d'ou" se llama así porque es amarilla y antes de abrirse parece efectivamente una yema). "Doy pequeños detalles que gustan. A veces, las obras de botánica son demasiado complicadas."
"Todo visto y comprobado"
-Hay que decir que, a diferencia de otros libros de plantas, este es original -, suelta Hernández en un momento de la conversación.
- ¿Original? Todas las especies estaban ya descubiertas, ¿no?
-Quiero decir que no hay nada copiado ni sacado de otro libro. Todo es de elaboración propia. Evidentemente, si las flores de una especie son rojas, en todos los libros indican que son rojas. Pero en las altitudes a que crecen las plantas, por ejemplo, no coincide con otras obras catalanes, porque éstas las han sacado los datos de floras alemanas. Aquí, antes de escribir, los comprobé todos. Si la "soldanel·la" es la primera flor de los Pirineos que sale cuando está la nieve fundiéndose, yo lo pongo porque la he visto en el lugar, y así en el 99 por ciento de los casos.
Un trabajo imponente, que tuvo que asumir en un tiempo récord, por tal como surgió el proyecto. Hernández había colaborado con dos capítulos en un título colectivo de Farell Editors, "Sant Llorenç del Munt i l'Obac. 30 excursions amb encant", y el editor le propuso un libro entero de flores pirenaicas. Ningún problema para Hernández, que a sus cuarenta años acumulando conocimientos de botánica sumaba su amplia experiencia en la zona: fue profesor en Puigcerdà, hizo la tesis en Jaca, durante casi dos décadas guió una excursión cada año por los Pirineos, y en los dos anteriores pasó una semana en Benasque y Ribes de Fresser.
"Pero el editor me lo propuso a finales de marzo y el libro debía estar listo el 15 de septiembre. Busqué a Joan Altimira (que ha sido, por cierto, uno de los mejores escaladores catalanes) para que hiciera las fotografías, y fue trabajar los dos meses de calor, de sol a sol." Un tiempo inusualmente breve para quién lo habitual es dedicar entre cuatro y siete años a un libro, para cuya edición, además, suele acabar poniendo dinero de su bolsillo. No ha sido así en "Flors dels Pirineus", su segundo título (y el primero en treinte años) en una editorial comercial, "Ha quedado muy conseguido y está teniendo muy buena salida. Estoy contento." El libro se presentó ayer en Sabadell.
Sant Felip Neri y Joan Cadevall
Àngel Manuel Hernández, por supuesto, no para quieto. Trabajos recientes suyos son "Médicos y cirujanos presentes en el Sitio de Melilla (1774-1775)", un estudio publicado por la revista Aldaba, y el libro "Els ponts d'esparraguera". Recientemente dio una conferencia en Collbató sobre el arquitecto Elies Rogent y los puentes de madera de la Puda, que posiblemente se publique en opúsculo, y a raíz de que el rector de Vacarisses le pidió, con motivo del centenario de Sant Felip Neri, que averiguara porque hay tanta devoción a él en la localidad,se pasó tres o cuatro meses investigando el tema, que posiblemente explicará en otro opúsculo.
"Y este año me he propuesto acabar la biografía de Joan Cadevall. El problema de este proyecto de libro es que no he conseguido un patrocinador, y, no puedo permitirme una autoedición, porque sería una obra extensa." Toda una vergüenza colectiva, que no haya institución o fundación o universidad que sufrague las prensas de un libro sobre la vida de Joan Cadevall i Diars (Castellgalí, 1846-Terrassa, 1921), autor de la importantísima "Flora de Catalunya", primera gran obra de síntesis de las especies botánicas catalanas; uno de los grandes científicos catalanes de su tiempo, de los pocos que ha dado nuestra ciudad, y que compaginó la botánica con una intensa actividad pedagógica (dirigió el Colegio Tarrasense), cultural y social.
LOS DATOS
Título: "Flors dels Pirineus"
Autor: Àngel Manuel Hernández Cardona (fotografías de Joan Altimira Noguera)
Editorial: Farell Edicions
Precio: 17 euros
ARA A PORTADA
Publicat el 05 d’abril de 2016 a les 20:12
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