Josep Monroig: "Tuve maestros muy preparados"

"Era una escuela preciosa con un patio espectacular que daba a la Rambla. Allí jugábamos 150 niños, todos al mismo tiempo y a fútbol, frontón, bolos... y después, cuando finalizaban las clases, continuábamos en la plaza del Progrés".

Es uno de los recuerdos que guarda Josep Monroig de su paso por el Grup Escolar Torrella de la Rambla. "Para nosotros, esta escuela es nuestra única referencia porque cuándo salíamos a los 13 o 14 años ya íbamos directamente a trabajar, aunque muchos después continuamos estudios de noche". Josep dice estar contento de la enseñanza recibida. "Al margen de ideologías, los maestros estaban muy preparados, la mayoría creo que eran de Terrassa y aunque la clase se impartía en castellano, de tu a tu y con los compañeros hablábamos en catalán". Pero no todos los docentes merecieron la misma simpatía. "Un día a la semana -evoca- venía un profesor de gimnasia que era falangista, repartía bofetadas a diestro y siniestro si no ponías atención o no hacías caso de lo que te decía. También había algún otro maestro que cuando alguién no sabía la lección pegaba con la regla". Y tras una anécdota, otra. Rememora Josep que los inviernos eran duros. "Hacíamos clase alrededor de una estufa de leña cuyos troncos habíamos subido, previamente, de una habitación de la portería que permanecía cerrada con llave y bajo control".