A más horas de luz, más sensación de fatiga

Publicat el 17 d’abril de 2017 a les 21:12
El 40 por ciento de los españoles se sienten más fatigados debido al aumento de las horas de luz propio de la primavera, según una encuesta que ha llevado a cabo la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación (Sedca) entre 1.800 personas.

Éste es un trastorno conocido como astenia primaveral, que a parte del cansancio también se caracteriza por la falta de apetito, atención y concentración. Además, quien lo padece, tiene una mayor dificultad para conciliar el sueño.

En sí, la astenia primaveral se define como un trastorno adaptativo que se sufre al pasar del invierno a la primavera y en el que aparece un cansancio tanto a nivel físico como psíquico.

Ritmos alterados
Según explica el doctor Juan Carlos Ocaña, miembro del Grupo de Trabajo de Fitoterapia de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, "todo se debe a una alteración de los ritmos circadianos a causa de un aumento de las horas de sol y al cambio horario que coincide con la nueva estación".

Los ritmos circadianos son aquellos fenómenos biológicos que inciden en las personas siempre a las mismas horas, como es por ejemplo el ciclo de estar despierto de día y dormir de noche.

El médico explica que los ritmos circadianos que regulan el sueño y la vigilia se alteran en primavera, ya que empezamos a desconectar más tarde porque anochece después.

La sintomatología de la astenia primaveral es leve y pasajera, "pero al mismo tiempo puede afectar a la vida cotidiana, ya que produce una inadaptación laboral y personal", comenta el especialista. Y si no se mejora, puede conducir a trastornos de ansiedad y del sueño, irritabilidad o incluso a tener accidentes, a causa de la falta de atención y concentración", añade.

Alimentos
Con tal de hacer frente a la astenia primaveral, la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación recomienda seguir una serie de consejos. Entre éstos se encuentran ser constantes en la práctica de ejercicio físico (que al menos debe durar treinta minutos al día); pautar una alimentación rica y variada; cuidar las horas de sueño y disfrutar del buen tiempo.

En cuanto a la nutrición, Sedca ha elaborado una lista de los alimentos que no deben faltar para contener la astenia primaveral.

Por un lado están aquellos que son integrales y que, al aportar fibra, ayudan a evitar el estreñimiento. Un problema, éste, que puede dar más cansancio y malestar.

En cuanto a las frutas y verduras, se aconseja tomar apios, rábanos y nabos, que son buenos para la depuración del organismo y resultan antioxidantes. Las alcachofas y las espinacas, además de los espárragos trigueros y blancos también son beneficiosos contra la astenia. Pasando a las frutas, destacan las fresas y los fresones por su cantidad de vitamina C y antioxidantes. También hay que pensar en los melocotones y los albaricoques, que son ricos en fibra, potasio, vitamina y carotenoides.

A su vez, los frutos secos serán unos buenos aliados por su contenido en omega 3, que ayuda al organismo a aumentar sus defensas y a prepararlo para combatir el estado de debilitamiento y cansancio. De hecho, los frutos secos son un buen alimento para picar entre horas si los tomamos en raciones de un pequeño puñado diario.

Y por último están las legumbres, que contribuyen a que el cansancio primaveral no sea tan acusado al contener una gran cantidad de fibra y minerales, como el magnesio, el selenio, el zinc y el potasio. Sirven para reforzar el sistema inmunitario de nuestro cuerpo.

EL DATO

Un tercio. Es la proporción de españoles que afirma sentir falta de apetito cuando llega la primavera, según la encuesta de Sedca. El mismo trabajo indica que casi la mitad de los entrevistados cambia su alimentación respecto al invierno.