La normalidad actual, el mejor premio

Publicat el 13 de maig de 2017 a les 04:00
Quienes recuperaron la cultura popular en Terrassa eran muy jóvenes. Salvo Jordi Labòria ("me venían chicos de 15 y 16 años que querían ser diables, y les comprabas los vestidos"), ninguno de los participantes en la mesa redonda había cumplido entonces los 20 años. "Pero también padres y gente más mayor se implicó. Mantuvimos un intercambio generacional", señaló Maria Dern. "Implicamos mucha gente de la ciudad. La cultura popular consiguió su objetivo: acercar la gente a Terrassa, al centro."

Y cuarenta años después de su momento fundacional, la cultura popular de Terrassa vuelve a estar en un buen momento. "Entre los jóvenes encuentro un ambiente parecido al que vivimos. Vuelven a tener ganas de cultura popular. Creo que, otra vez, estamos en un momento interesante, del que saldrán cosas nuevas." A finales de la década de 1970, "lo que hicimos fue recuperar un espíritu identitario. Queríamos que no se perdieran las tradiciones. La gente, ahora, está en un grupo de cultura popular para hacer barrio o ciudad, y sobretodo para pasárselo bien", señaló Puig. "Ya no siente la amenaza de que aquello puede acabarse y no tendremos cultura catalana. Todo funciona por los jóvenes, porque se lo pasan bien. Esta 'normalidad' sería, para mí, el mejor premio". Codinas apuntó que siguen surgiendo grupos nuevos creados por gente joven, pero también por personas de 50 años o más. "La cultura popular de Terrassa sigue creciendo, y en gran parte gracias a todos los que nos precedieron".