La obesidad impide disfrutar de una salud masculina plena

Publicat el 11 de setembre de 2017 a les 20:44
El 67% de los hombres con disfunción eréctil tiene exceso de peso u obesidad, uno de los principales obstáculos para gozar de una salud sexual plena. Si al sobrepeso le sumamos el sedentarismo o el consumo de alcohol y tabaco, los problemas en las relaciones sexuales de pareja aún son mayores. Así lo advierten expertos de Boston Medical Group (BMG). Insisten en la importancia de cuidar las rutinas diarias y "en estar atentos a las dificultades que puedan surgir para mantener una erección durante las relaciones sexuales". Este trastorno tiene solución pero puede ser, además, síntoma de una enfermedad de tipo cardiovascular o metabólica que aún no está diagnosticada y que es preciso tratar, asegura el doctor José Benítez, director médico de Boston Medical Group.

Ante cualquier alerta es importante consultar a un especialista. También es de gran ayuda la práctica moderada y regular de deporte, pues activa la circulación sanguínea necesaria para conseguir la erección. Además, es preciso comer más frutas y verduras, tomar menos azúcar, no fumar ni beber alcohol y procurar llevar una vida libre de estrés y preocupaciones.

Enemigos de la salud sexual

Estos son los principales factores que perjudican la salud sexual:

Las comidas ricas en grasas y azúcar, además de favorecer la obesidad y la hipertensión disminuyen la energía en el hombre y su salud sexual. La obesidad desemboca en patologías como la disfunción eréctil.

Los niveles altos de glucosa afectan a la circulación y pueden producir daños en los vasos sanguíneos. La dificultad de alcanzar la erección o de mantenerla es el primer síntoma de la diabetes.

El menor flujo de circulación hacia el pene hace más difícil la erección. Los niveles de colesterol alto también son un obstáculo.

Al haber una interrupción de la respiración, el nivel de oxígeno en sangre se reduce.

La ansiedad disminuye la libido e impide al hombre concentrarse en la relación sexual.

A no dar placer o a eyacular pronto; por un complejo físico o por no responder de manera adecuada.

n Dieta poco saludable.

n Diabetes.

n Hipertensión y colesterol.

n Apnea del sueño.

n Estrés y depresión.

n Miedo o vergüenza.