Terrassa pone a la venta más de once millones para el Gordo de Navidad 

Publicat el 20 de desembre de 2017 a les 19:18
Semana de muchas emociones esta que vivimos Hoy tocan elecciones al Parlament de Catalunya y mañana el sorteo del Gordo de Navidad. Los resultados de los comicios se sabrán horas antes de que empiece a girar el bombo con los números de la suerte. El tradicional sorteo es uno de los que atesora más historia (más de doscientos años) y tradición y también el que reparte más premios y de mayor cuantía.

Terrassa ha puesto a la venta un total de 11. 546.920 euros, según han informado desde la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado. Esto representa que cada egarense podría gastarse un promedio de 54 euros en la lotería de Navidad pero es una cantidad provisional porque no se conoce si todo lo consignado se venderá. Si fuera así, significaría que la inversión local para este sorteo habrían subido puesto que el año pasado se vendieron 9.891.220 euros, una cantidad que se cuantificó como unos 45 euros de promedio por cada terrassense.

El importe que se juega aquí se mueve en los mismos parámetros que en el resto de la comunidad autónoma. En el global de Catalunya se han consignado 441. 772.000 millones de euros, lo que representa un 58,73 euros por habitante (52,40 euros el año pasado) . Y a nivel de todo el Estado es de tres billones de euros ( en concreto 3.080.003.580) con un promedio de 66,16 por habitante (57,33 el año anterior).

Los premios
Los datos principales a retener son los primeros premios. Así, el primero o sea el Gordo repartirá cuatro millones a la serie, el segundo premio, un total de 1.250.00 euros a la serie; el tercero, un total de quinientos mil euros a la serie, el cuarto se dividirá en dos premios de 200 mil euros y el quinto en ocho premios de sesenta mil euros. Y luego está la "pedrea" (eso que se conoce como el pellizco) que concederá 1.794 premios de mil euros.

El sorteo empezará sobre las nueve de la mañana y se celebrará en el Teatro Real de Madrid, igual que en los últimos años. El edificio ha sustituido hace ya siete años al Palacio de Congresos. Como es tradicional, los niños del Colegio de San Idelfonso serán los encargados de repartir la suerte y si esta llegara la posibilidad de hacer realidad algún sueño adormecido.

El proceso, que se asemeja a un ritual, es complejo. Dos de los niños cogen una bola de cada bombo y se las hacen llegar a otros dos, que son los responsables de cantarlas e insertarlas en los alambres que van a dar a la tabla donde se reúnen los números. Los bombos vuelven a girar cuando las bolas llegan a la tabla. Cuando se juntan doscientas bolas de cada clase, las tablas y los niños son reemplazados, un proceso que concluye al vaciar el bombo de premios. Pasados los 45 minutos desde el final del sorteo, se emite la lista de premios elaborada por un equipo anónimo de cerca de cuarenta personas a través de un programa informático. La tarea de imprimir la lista oficial de premios corresponde a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, que por la tarde se distribuye a las Administraciones y de Loterías y a los medios de comunicación.

En ese momento, sin embargo, cuando se divulgan las listas oficiales, ya se sabe quién y quienes han sigo agraciados con el Gordo de Navidad y otros premios importantes. Terrassa, como tantos otros municipios, espera todos los años ser afortunada y lógicamente así lo desean los terrassenses que han comprado aquí y también fuera.

Sin fronteras
La lotería de Navidad, como todos los juegos de azar y tantas otras cosas, ya no tiene fronteras. Es global. Los números se pueden comprar fuera de aquí de modo presencial y por internet. De ahí que tampoco se sepa con certeza cuál es la inversión que hacen los egarenses para este sorteo extraordinario. Hay personas con vínculos familiares, de amistad y laboral que residen en otros lugares por lo que es fácil que los boletos viajen de aquí para allá. Eso pasó en 1993 cuando vecinos de Terrassa fueron afortunados con el Gordo porque tenían décimos de Alicante. Y hace diez años, un grupo de personas mayores también resultaron agraciados al comprar participaciones de un primer premio que se vendió en Vic.