Una obra de Woody Allen abre el Ciutat de Terrassa de teatro

Publicat el 20 de gener de 2017 a les 19:57
En 1966, cuando nació el Premi Ciutat de Terrassa de teatro amateur, que el Casal de Sant Pere organiza cada año, la televisión era en blanco y negro y de un solo canal, de teléfonos había pocos y eran fijos, las obras teatrales estaban sometidas a censura,y, para escogerlas, el comité seleccionador tenía que ir a verlas donde se representaran. Después, en las década de 1980, los grupos las enviaban en vídeo, luego en dvd. Ahora las ponen en YouTube y tienen su Facebook.

Las tecnologías han cambiado pero el Ciutat de Terrassa se mantiene y ahora es el certamen de teatro amateur más antiguo de Catalunya, con un público "muy fiel. El pasado año tuvimos una media de 180 asistentes por función, y más de 250 en alguna. Y hay una parte de los espectadores que vienen cada semana, consultan el programa, le gusta participar en la votación popular", señala Teresa Casals, que ha estado en la organización desde el primer año, y recuerda que en esas ediciones iniciales, antes de que se construyera la sala Crespi, las representaciones se hacían en el "Casalet", un teatro que existía donde ahora ensayan los esbarts.

Cada domingo por la tarde
El Premi Ciutat de Terrassa de teatro comienza mañana su edición número 43, sin novedad en sus características. Presenta diez obras a concurso, más otras dos fuera de él, que el comité seleccionador -Teresa Casals, Jordi Serra y Eduard Gràcia- ha escogido tanto por su calidad como en aras de dar una variedad (hay comedia, drama, teatro de autor, creaciones propias) al conjunto de la programación. Han tenido que decidirse entre 48 obras presentadas, "de las cuales una veintena podrían haber entrado perfectamente. Escoger cada año cuesta". También tienen establecido no incluir textos representados en los tres últimos años, ni repetir grupos de la edición anterior.

En esta ocasión hay tres grupos inéditos en el concurso (Guspira, de Cassa de la Selva, Onze al Teatre, de Sant Quirze del Vallès, y Tequatre, de Figueres), y "destacaríamos la juventud de la gente que se ha presentado, lo que está muy bien. El grupo Abraxas, que vendrá con "Casa de nines" de Ibsen, lo forman actores muy jóvenes, y su montaje es de una gran calidad".

La duración de las obras ronda los 75 minutos, salvo "Pels camins de la mentida", de una hora y cuarenta minutos, y "Les noies del calendari", que supera las dos horas. "Ya no es como antes, que las obras eran de tres actos y duraban tres horas. Más allá de los 75 minutos, los espectadores actuales comienzan a ponerse nerviosos."

Desde hace unos años, el certamen se complementa con una o dos obras fuera de concurso, que prolongan la programación hasta Semana Santa. En esta edición, ambas serán montajes de Qollunaka, grupo vinculado al Casal de Sant Pere, y una de ellas un estreno, "Tot assajant Don Mendo".

Como siempre, las funciones se realizan en domingo, a las seis de la tarde, en la sala Crespi (c/ Major de Sant Pere, 59-63). Las entradas tienen un precio de 11 euros.