"La ópera está más presente en la vida de lo que parece" 

Publicat el 24 de novembre de 2017 a les 22:02
El periodista y escritor Marcel Gorgori (Barcelona, 1968) se ha convertido en los últimos años en el divulgador por excelencia de la ópera en Catalunya, gracias a su labor en programas televisivos como "Nit d'arts" o "Va d'òpera", artículos, conferencias o libros. Recientemente ha dado un paso más con la creación de Sinfonova, ambicioso proyecto de un coro y orquesta cuyos conciertos incorporan "procedimientos comunicativos innovadores". Su primer espectáculo fue "Només per uns quants?", y el segundo, "La rebotiga de l'òpera" , podrá verse el domingo en el Centre Cultural.

¿Cuando empezó a escuchar ópera?
Debía tener ..mmm, unos 15 años.

Muy joven, ¿Herencia familiar?
En casa no había una gran afición, pero sí algunos discos de tenores y arias. En esa época comencé a interesarme también por la música sinfónica, a tocar algún instrumento (la guitarra) a nivel muy básico. Enseguida me gustó mucho. Cuando empecé a comprarme óperas, a los 22 ó 23 años, hacía radio, y un compañero me recomendó una maestra de voz. Como meros ejercicios, me hizo hacer escalas y cantar arias, lo que hizo aumentar mi interés por la ópera. Y cuando tuve la oportunidad de convencer a un jefe de programación para que me dejara realizar un programa de ópera diferente, pues lo aproveché.

!Y vaya sí lo ha hecho! Hay que reconocer que en Catalunya faltaba un divulgador de la ópera. Lo había sido Roger Alier.
Roger Alier es el maestro, el sabio. Hace unos años salió Ramon Gener con el programa "Òpera en texans". Pero cuando yo comencé con la ópera en la televisión, era un yermo. Lo máximo que se hacía era programar una ópera de arriba a abajo. De oficio soy periodista, no crítico ni historiador de la ópera, pero hace tantos años que me gusta y que me dedico a ello profesionalmente, que he aprendido forzosamente. He juntado el conocimiento que he ido acumulando sobre el objeto, la ópera, y el oficio de explicar cosas, y me ha ido bien.

Y de explicar la ópera, pasa a presentarla desde lo alto del escenario con Sinfonova.
Cuando surgió la oportunidad de crear Sinfonova, me di cuenta de que era algo que no se había hecho nunca, al menos con la calidad musical y vocal que llevamos. A veces, bajo el paraguas de la divulgación, se sacrifica la calidad. No es nuestro caso: llevamos los mejores solistas del momento. Si lo desnudáramos de todos los recursos adicionales, un concierto de Sinfonova sería de primer nivel. Esto es clave. La calidad es el objetivo número 1.

¿Cuál es el concepto de Sinfonova?
Sinfonova es una marca que produce conciertos operísticos de alta calidad musical, que incorporan una serie de recursos no habituales: vídeos, un presentador-conductor a lo largo de todo el concierto, que soy yo, la utilización de la iluminación de la sala (incluimos una aria de "La reina de la noche" de Mozart, en la que se hace de noche en el escenario para reforzar el impacto de la pieza). Y todas las producciones de Sinfonova tienen un argumento. En "La rebotiga de l'òpera" el tema es el acceso del público a lo que ha sucedido antes del concierto, para que valoren aquello que están escuchando en estos momentos. La intención es dar a conocer que los artistas lo hacen perfecto en el escenario pero esta peerfeicción les ha costado sudor y lágrimas. Los vídeos explican cosas poco confesables de la gente de la ópera: rivalidad, divismo.

En esto del divismo, la ópera tiene cierta mala fama.
Sí. Pero es como cualquier ámbito con grandes estrellas que se la juegan mucho en cada ocasión. La soprano no hablará con nadie antes de salir a cantar, porque está muy concentrada, porque sabe que tiene una aria muy dificil y que si falla una sola nota el público tendrá un mal criterio de ella. Estas personas se la están jugando cada vez que salen al escenario. Como cuando Messi tira un penalty. Vivir tan al filo de la navaja les produce miedos, inseguridades antes de salir al escenario, y esto da pie a algún divismo. Para un vídeo, convoqué una tertulia con Jaume Aragall, una gran estrella de la ópera, en la que explicó cosas que le han pasado en su vida. Al final, se humaniza a la gente que interviene en la ópera.

¿El objetivo, entonces, es atraer al público atraído por la ópera, pero que no acaba de entrar del todo?
Aspiramos a que venga todo el mundo que sigue la ópera. La incorporación de estos elementos va dirigida a suscitar un mayor interés en las personas que dicen "sí, me gusta algún disco, pero no me he decidido nunca a asistir a una reprsentaciónde ópera. Pues voy a probarla". Quiere ser la vía de acceso para todo este público. Pero el nivel músical y vocal de Sinfonova es muy alto. No podemos perder el público natural de la ópera.

¿El público de ópera puede crecer?
!Por supuesto! Ya ha crecido con respecto a hace unos años, y por esto es posible Sinfonova, que suma más de 150 personas en el escenario. En Terrassa se ha hecho una "Traviata" muy destacada, y esto es lo que nos ha animado a traer el concierto. Necesitamos teatros enormes, porque es un espectáculo muy costoso, y el auditorio del Centre Cultural Terrassa está en el límite, por su capacidad de setecientos butacas. Todos los teatros que hemos hecho son grandes, y en enero este espectáculo lo llevaremos al Liceu. El público existe, y todavía puede crecer más. Porque la ópera está más presente en la vida cotidiana de lo que parece.

¿En serio?
En el primer espectáculo, "Només per uns quants?", incluimos ópera de siete u ocho anuncios de televisión, de tres películos con fragmentos de obrasque todo el mundo conoce. El himno de la Champions es de Haendel, por ejemplo. Guardiola, para animar a los jugadores del Barça antes de la final de la Copa de Europa de 2009, en Roma, les puso "Turandot". ¿Y cuánta ópera llevamos en el mòvil? Al menos, "Carmen". Incluso está en las máquins tragaperras: el "tiroriro" que hacen es de "Carmen". En el primer concierto, interpretamos todas estas piezas y el público volaba.

¿La ópera contemporánea está presente en Sinfonova?
De momento, no, lo que no significa que no vayamos a incorporar alguna pieza. En principio, vamos a buscar las grandes óperas, desde el neoclasicismo (Mozart) hasta Puccini, Verdi, Montenegro, Wagner. No intentamos dar lecciones al público, sino que se lo pase bien.

LA CITA

Espectáculo "La rebotiga de l'òpera"

Intérpretes: Orquestra Barcelona Filharmonia, Cor Camerata Impromptu, Carles Cosías (tenor) Sara Blanch y Elisa Vélez (sopranos) Carles Pachón (barítono).

Presentador: Marcel Gorgori

Fecha: Domingo día 26, a las seis de la tarde

Lugar: Centre Cultural

Precio: 28-32 euros