Policía más próxima que nunca

21 d’abril de 2020
LA crisis sanitaria está golpeando con fuerza nuestras vidas, nuestras mentes, nuestros trabajos, nuestro día a día. Como regidor de Via Pública, Seguretat i Protecció Civil me encuentro ante una situación extraña e incómoda, pero también ante una capacidad de servicio y de solidaridad digna de alabar. En Terrassa tenemos la suerte de contar con una Policía Municipal que, ahora más que nunca, está trabajando y dejándose la piel. Aunque a nadie le gusta que se hable de sanciones, para mayor seguridad de todas y todos creo que hay que valorar que los agentes hayan llevado a cabo (hasta el domingo 12 de abril) más de 1.200 servicios sancionadores por incumplimiento de las normativas de confinamiento. Estos días llevamos a cabo un comité de seguimiento y hemos reforzado la comunicación interna y los equipos de trabajo, con un énfasis especial en mejorar la seguridad y garantizar también la salud de los agentes para que puedan llevar a cabo sus funciones.

Estas semanas se hace todavía más visible la vocación de servicio y la solidaridad de la Policía con los ciudadanos y las ciudadanas. Más allá de las sanciones (repito, necesarias para la seguridad de todos y todas), la Policía está realizando servicios humanitarios y asistenciales. A pie de calle, en los barrios, en las vidas de toda la ciudadanía. Por poner un ejemplo, podemos detallar un trabajo conjunto con la regidoría de Salud de Terrassa y el Ayuntamiento de Sabadell para llevar a cabo recogida y reparto de medicamentos oncológicos desde el Hospital Parc Taulí de Sabadell.

Tampoco olvidemos que hablamos de un servicio no exento de riesgos. Un ejemplo de esto: hace unos días dos agentes hicieron maniobras de RCP (reanimación cardiopulmonar) a una persona que estaba inconsciente en su domicilio. Los agentes, para evitar que esa persona muriera, incluso le hicieron el boca a boca, con el riesgo de contraer el Covid-19. De hecho, tuvieron que estar confinados y dieron negativo en el test. Pero ante la situación solo pensaron en intentar salvar una vida.

Son días duros, pero puedo garantizar con orgullo que la Policía Municipal no para. No pasa cada día por todas las calles, claro, y eso puede generar en parte de la población la percepción de que no están. Pero están, y más en unos tiempos en los que la ciudadanía no se debe adjudicar funciones policiales. Para eso están los y las agentes.

Demos valor a una profesión. La Policía Municipal, las Agrupaciones de Defensa Forestal (ADF) y la empresa municipal de limpieza Eco-Equip están trabajando al límite y están dando las gracias a los terrassencs y las terrassenques por su actitud y por su comportamiento.

Eso no quita que debemos seguir insistiendo en una responsabilidad por parte de toda la ciudadanía, ya que no siempre es así. Todavía hay picaresca y quien incumple las normas de confinamiento. Hemos llegado a encontrar a un ciudadano de Sabadell que venía a comprar carne a Terrassa. O al propietario de un perro que vive en Ca n'Aurell paseando con el animal en Can Jofresa. Seamos todos y todas conscientes de que ayudamos quedándonos en casa o saliendo solo si hace falta y cumpliendo unas normas básicas.

Déjenme insistir en el papel de la Policía Municipal. Valor, esfuerzo y trabajo en primera línea a pesar de las circunstancias pueden describir su tarea estos días extraños. Están sufriendo bajas por ello, sí, pero seguimos priorizando la atención de proximidad, pensando especialmente en los colectivos más vulnerables, como nuestra gente mayor y personas sin hogar, que requieren una atención especial.

Más que nunca, contamos con un trabajo de proximidad, de esfuerzo y de riesgo, con muchas horas de trabajo y, por encima de todo, de servicio. En eso se basa el trabajo de la Policía Municipal. Sus rostros, cuando acaban cada turno, lo demuestran. Su prioridad no es sancionar, no es perseguir. Es ayudar, es informar, es salvar vidas.

Terrassa es, y seguirá siendo, una gran ciudad. Activa, solidaria, responsable, abierta y comprometida. Sigamos demostrándolo entre todas y todos.

 * El autor es concejal de Via Pública, Seguretat i Protecció Civil.