Cronología de los pactos de gobierno

El gobierno municipal de Terrassa ha estado marcado por la hegemonía política de un PSC en la alcaldía desde las primeras elecciones democráticas de 1979. Durante casi 4 décadas, los socialistas han alternado mayorías absolutas con 5 pactos a la izquierda y dos con CiU.

►1979-1983. PSC- PSUC y más tarde, PSC-CiU. En las primeras elecciones democráticas los socialistas ganaron al PSUC por sólo 178 votos, pese a lo cual emprendieron gobierno en común. Diez meses después, la guerra entre prosoviéticos y eurocomunistas dinamitaría el pacto, dando paso al primer acuerdo de gobierno entre el PSC y Convergència i Unió. La sociovergencia garantizó la estabilidad desde 1981 hasta el final del mandato.

►1983-1987. Primera mayoría absoluta. En el segundo mandato democrático, el PSC consolidó su hegemonía política con un resultado histórico, 18 concejales de 27, y una holgadísima mayoría absoluta que conservaría durante doce años. Con el hundimiento estrepitoso del PSUC, Manuel Royes gobernó en solitario y se convirtió en el líder municipal de la izquierda.

►1987-1991. Segundo gobierno del PSC en solitario. El PSC perdió tres concejales en 1987, aunque logró mantener la mayoría absoluta. Lo hizo en un pleno donde CiU consolidó, con ocho concejales, su papel como primera fuerza de la oposición. Durante los cuatro años Manuel Royes gobernó cómodamente en solitario.
n 1991-1995. Sigue la hegemonía socialista. Las elecciones de 1991 repitieron, prácticamente calcado, el Consistorio del mandato anterior. El PSC revalidó su mayoría absoluta y encaró un nuevo ejercicio gobernando de nuevo sin apoyos externos.

►1995-1999. ICV se incorpora al gobierno. Ni la eclosión urbanística de la ciudad, ni la transformación que experimentó con los JJOO evitarón que el Partit dels Socialistes de Catalunya, que esperaba cosechar un éxito electoral histórico, se llevara un varapalo electoral en 1995 y, con 13 concejales, se viera forzado a un pacto político. Fue con Iniciativa per Catalunya-Verds (ICV), una alianza que revalidó en tres ocasiones más convirtiéndo a los rojiverdes en su socio natural.

►1999-2003. Vuelta a la mayoría absoluta. Manuel Royes recuperó en 1999 la mayoría absoluta con 16 concejales y una CiU en retroceso que se quedó con 5. Todo anunciaba un nuevo gobierno en solitario, avalado por una mayoría socialista amplia en el pleno, pero Royes quiso explorar el pacto. Contra todo pronóstico, ICV y ERC rechazaron la oferta y el alcalde probó con CiU, pero su militancia tumbó finalmente la propuesta. El episodio daría paso la última mayoría absoluta socialista en el pleno y su último gobierno en solitario en la ciudad.

►2003-2007. Primer tripartito PSC, ICV-EUiA y ERC. En 2003 el PSC pierde la mayoría absoluta que ostentaba hasta ese momento al obtener 13 concejales. Anticipándose a lo que sucedería meses más tarde en la Generalitat con el Pacte del Tinell, Pere Navarro, que se sometía por primera vez a las urnas (tras haber obtenido la vara de alcalde en 2002 de manos de Manuel Royes) configura el primer tripartito de izquierdas en la ciudad de Terrassa pactando con ICV-EUiA y ERC, que cuentan con tres ediles, respectivamente,

►2007-2011. Se reedita la coalición a tres. Los tres partidos de gobierno obtienen los mismos resultados que en las elecciones de 2003, excepto ERC, que pierde un concejal. Loa socios deciden repetir alianza a tres y conformar el segundo tripartito de la democracia en Terrassa (PSC, ICV-EUiA y ERC) sumando un total de 18 regidores.

►2011-2015. PSC e ICV-EUiA. Empieza la debacle del PSC, que en plena efervescencia del proceso hacia la independencia de Catalunya se queda con once concejales, los mismos que obtuvo en el primer ayuntamiento democrático. ERC pagó los platos rotos del maltrecho segundo tripartito catalán y salió del Consistorio, pero la estabilidad electoral de Iniciativa y la trayectoria acumulada de gobierno en común permitieron conformar un Ejecutivo en mayoría entre PSC e ICV-EUiA.

►2015-2019. PSC-CiU. El mandato actual arranca con los peores resultados de su historia para el PSC, que obtiene nueve concejales. La integración de ICV-EUiA en la amplia confluencia de Terrassa en Comú, que se presenta como alternativa, hacen inviable, a priori, un pacto a la izquierda. Finalmente, el PSC más hundido, encabezado por Jordi Ballart (que se sometió por primera vez a las urnas, aunque llevaba en la alcaldía desde finales de 2012) se alía con la CiU en horas más bajas (ha perdido seis concejales y se ha quedado solo con tres), conformando un pacto de gobierno en minoría entre quienes fuesen acérrimos adversarios.