El sector del taxi local secunda la huelga contra Uber y Cabify

Los taxistas egarenses se unieron ayer al paro de veinticuatro horas convocado por las organizaciones y las federaciones nacionales de taxistas contra la actividad de los Vehículos de Alquiler con Conductor (VTC), es decir contra las plataformas como Uber o Cabify. La cooperativa Teletaxi Egara, la más numerosa de la ciudad, se unió a la huelga para protestar así contra la "competencia desleal" de las plataformas de móvil de alquiler de vehículos con conductor.

El taxi local solo asumió ayer los servicios que tenían como origen o destino los centros hospitalarios, los ambulatorios y los solicitados por personas mayores. El presidente de Teletaxi Egara, Francesc Palmero, explicó que en estos servicios mínimos estuvieron disponibles el 20% de la flota, de un total de 83 vehículos. Palmero denuncia que de los 10 mil nuevos vehículos de alquiler con conductor que podrían estar circulando en los próximos meses en España, tres mil afectarían a Catalunya. Esto sería "desastroso" para el sector, insiste, "en un momento en el que parece que empezaba a subir un poco el trabajo, después de años de crisis".

Miembros de la cooperativa Teletaxi Egara se unieron a la manifestación de protesta convocada en Madrid, adonde acudieron miles de taxistas procedentes de todo el país para protestar contra los vehículos de alquiler con conductor (VTC) ofertados por Uber y Cabify. La delegada del Gobierno, Concepción Dancausa, cifró en cuatro mil personas los asistentes a la marcha.

Los asistentes portaban banderas de distintas comunidades autónomas y carteles con lemas como "De la Serna dimisión", "El PP quiere destruir 100.000 puestos de trabajo", "No a la competencia desleal" o "Uber compra políticos en Europa".

Sentencias del Supremo
El presidente de la Asociación Nacional del Taxi de España (Antaxi), Julio Sanz, explicó que el sector del taxi en España lleva más de siete años viviendo una situación de "inseguridad jurídica" derivada de "vacíos legales y malas legislaciones". Sanz reclamó soluciones al Gobierno para devolver la estabilidad a más de 100.000 familias que dependen del taxi y exigió el cumplimiento de la legislación vigente, que contempla que por cada treinta licencias de taxi pueda coexistir una de VTC.

Los taxistas insisten en que ese ratio se ha vulnerado. Incluso, tras la reciente sentencia del Tribunal Supremo que permitirá 80 nuevas concesiones de licencias VTC, creen que en los próximos meses podrían circular 10.000 coches más con pegatina VTC y "poner aún más en peligro" el marco legal. El sector clama a las administraciones por un mayor control sobre esta actividad competidora. Se queja de sus precios más bajos que rompen el mercado, de eludir las obligaciones fiscales, de intrusismo y de prácticas ilegales en la recogida de viajeros.