Pasillos para peatones antes de las obras para ampliar las aceras

Publicat el 08 de juny de 2018 a les 21:21
El 10 por ciento de las aceras de Terrassa tienen una amplitud inferior a los noventa centímetros. El 30 por ciento tienen menos de 1,50 metros de ancho. Para paliar este problema, y antes de emprender las obras pertinentes de ampliación, el Ayuntamiento ha modificado la señalización horizontal de varias calles y creado pasillos para peatones.

En las últimas semanas se han pintado estas franjas en la calle del Col·legi y la de Martín Díez. También en la del Tibidabo, la de la Ciutat de Pàmiers y la de Albí. Con estas actuaciones, el Consistorio afirma que se consigue "mejorar la movilidad a pie, pacificar el tráfico y demorar la velocidad de los vehículos", cumpliendo así "con las condiciones de continuidad, conectividad, seguridad y accesibilidad que prevé el Plan de Movilidad Urbana de Terrassa 2016-2021".

Los pasillos para viandantes no son una solución definitiva, sino temporal; una acción previa a la urbanización que se realizará en las zonas donde se hace necesario ampliar aceras. La normativa contempla una acera mínima de 1,80 metros para que sea accesible.

Obstáculos
La anchura inferior a noventa centímetros impide la circulación de carritos infantiles o sillas de ruedas o, incluso, que dos transeúntes puedan caminar a la vez por un tramo. En calles de menos de siete metros de amplitud se impone optar por soluciones de plataforma llana con aceras y calzada al mismo nivel. "Tanto esta inversión como una ampliación de acera requieren un gran presupuesto económico. Los pasillos de viandantes representan una medida transitoria previa a la urbanización definitiva", destaca el Ayuntamiento.

La nueva señalización horizontal, por otro lado, contribuye a dotar a la ciudad "de una red de itinerarios prioritarios" que resulten atractivos para caminar, indica el Consistorio. Terrassa cuenta con diecisiete recorridos en estos barrios: Centre, Cementiri Vell, La Maurina, Ègara, Les Arenes-La Grípia-Can Montllor, Ca n'Aurell, Torre-sana, Sant Pere, La Cogullada, Pla del Bon Aire y el polígono industrial de Santa Eulàlia.

El plan de movilidad comprende medidas para reducir la contaminación y el consumo de energía contribuyendo a que los ciudadanos modifiquen sus hábitos cotidianos de movimiento.