Perfecta y emotiva evocación del alma musical de Hargrove

Publicat el 15 de març de 2019 a les 20:49
Una fotografía a tamaño natural de Roy Hargrove (1969-2018) acompañaba, en el escenario de la Nova Jazz Cava, al quinteto que el jueves ofreció el concierto de recuerdo a este músico norteamericano, premio "Jazzterrassman" 2010, a cuya memoria esta dedicada la edición de este año del festival. Y cuando intervenía el trompetista Benet Palet, apartabas la vista de él para mirar la fotografía, y era como escuchar a Hargrove, y recuperar la memoria de los grandes momentos que este gran músico deparó en el total de once conciertos que ofreció en Terrassa a lo largo de su trayectoria.

En una Cava prácticamente llena, de un público entusiasmado en todo momento, Carles Pineda (saxo alto), Xavier Algans (piano), Pau Lligadas (contrabajo) Pau Bombardó (batería) y Palet fueron una maquina de bop absolutamente perfecta, que al virtuosismo con que recreaban el estilo de Hargrove sumaron una emotividad que impregnó a todos los espectadores en dos horas de concierto que se hicieron cortas. En su presentación, Valentí Grau recordó que Hargrove fue un músico muy apreciado en la ciudad por su implicación en JazzTerrassa, y algunos de sus conciertos. El primero en la década de 1990, con Johnny Griffin en el Centre Cultural, cuando solo tenía 20 años. Otro"fue uno de los más excepcionales que se hayan hecho jamás aquí en la Cava".

Memoria del Carnegie Hall
Al año siguiente de ser descubierto por Wynton Marsalis, Hargrove ya actuó con Sonny Rollins en el Carnegie Hall de Nueva York. "Las localidades estaban agotadas, pero finalmente conseguí entrar. Y al ver a Rollins y Hargrove me puse a llorar. Ahora tocaremos una de las piezas que hicieron esa noche en el Carnegie Hall, 'Vals hot', uno de los primeros valses de jazz", explicó, con la emoción de ese recuerdo de juventud, Pau Bombardó.

Vino luego "Circ", un standard "que los Jazz Messengers de Art Blakey jazzificaron, y que Roy Hargrove jazzificó aún más. Nosotros nos quedaremos en un punto medio, porque hay un nivel que no se puede conseguir". El primer set se cerraría con un tema emblemático del repertorio de Hargrove, "Hey fly" de Randy Weston.

Tras el descanso, reemprendieron con "Strasbourg-Saint Denis", el único tema de autoría de Hargrove del concierto. Lleva el nombre de la estación de metro de París al lado del club New Morning, "que, cuando él tocaba, se hundía". Una pieza larga, que permitió alternar momentos protagonizados por cada instrumento. El concierto se aceleró con una pieza de Miles Davis, transmutada en una excelente intervención casi en solitario del contrabajista, adornada con mínimos toques de piano y batería, y finalizada con un apoteósis de los cinco, con el saxo y la trompeta pletóricos.

El concierto siguió con "Parker's mood", "un blues de Hargrove tocaba mucho", y otra pieza habitual en su repertorio, "Nature boy" "aunque nosotros le hemos cambiado la versión. La dedicamos al mejor amigo que tuvo Roy Hargrove en Terrassa, Vicente Hurtado, también desaparecido". El último tema fue "Una más" de Kenny Dorham, con una deliciosa melodía de aire bossa nova, y su prolongación, ya con Valentí Grau en el escenario, ejerció de mínimo bis y climax final.